FOTODEPILACIÓN IPL

La depilación láser o fotodepilación por Luz Pulsada Intensa (IPL) son, sin duda, los métodos mas eficaces, cómodos y seguros para eliminar el vello de forma permanente. Son prácticamente indoloros y aportan suavidad a la piel.

El pelo y la piel son de distinto color porque contienen pigmento de melanina en diferentes cantidades. Éste es el principio en que basan su eficacia tanto el láser como la luz pulsada intensa. La materia más oscura, que suele ser el pelo, absorbe el haz de luz y lo conduce por el tallo piloso hasta el bulbo. Éste carece de pigmento, pero se destruye gracias al calentamiento que la luz produce en toda la estructura.

Los pelos que pueblan la piel se hallan en distintas fases del ciclo de crecimiento; en las iniciales ni siquiera son visibles y escapan al alcance de la luz. Por eso, cada zona debe someterse a varias sesiones de fotodepilación. Entre unas y otras, el vello sólo debe combatirse con el rasurado, pues es indispensable preservar el tallo piloso y no arrancarlo, como ocurre con cera y otros sistemas de tracción.

La fotodepilación se complica cuando el vello es rubio o blanco (ya que absorbe la luz en menor medida), y también cuando la piel es oscura (ya que la piel puede absorber la luz dirigida al pelo y sufrir quemaduras).

Este tratamiento además de eliminar el vello, ayuda a solucionar problemas de foliculitis (nacimiento del vello por debajo de la piel) y de hirsutismo (desarrollo excesivo del pelo).